quinta-feira, 23 de fevereiro de 2012

Bioética y humanidad



Leyendo la entrevista hecha a la enfermera Juceli Maciel[1], percibo en sus palabras una profunda humanidad que ella ha ido encarnando a partir de su trabajo con pacientes terminales. Tal vez la dificultad de posicionarnos respecto de un problema bioético, esta muy ligada al desarrollo de una sensibilidad especial frente a lo que llamamos humanidad, en nosotros y en los demás.
Cuando pensamos en humanidad pensamos en alguien concreto, una persona comprensiva, capaz de compasión, capaz de  escuchar y decir las palabras ciertas en el momento preciso, alguien que ha vivido muchas experiencias y tiene cierta capacidad “acrobática” de ponerse en el lugar del otro y sentir con él. Cualidades deseables en aquellos que tienen la  tarea de cuidar de otros, que como Juceli han descubierto el gran poder terapéutico de una presencia cálida, que alivia la soledad y alimenta la esperanza.
Jesús modelo de humanidad plena, muestra de que estamos hablando. Lo vemos escuchando, sintiendo compasión, sanando, acogiendo a los rechazados y cenando con ellos… preocupado siempre por aliviar el sufrimiento de los otros, todo esto desde su condición frágil, vulnerable, humana. Porque a la hora de acompañar el sufrimiento de otro, probablemente una de las mejores herramientas que tenemos es nuestra propia fragilidad. Por Néstor Fajardo (aluno).

Créditos da figura: http://www.newscientist.com/blog/shortsharpscience/uploaded_images/eyes_closed_small-751140.jpg

[1] IHU online. Os pactos do ser humano diante da própria finitude, entrevista com Juceli Maria Maciel, São Leopoldo 31 de outubro 2005.

Um comentário:

  1. É a vida mais humana da humandade que se humaniza na sua relação consigo. Nestor encontra na fragilidade humana, a qual a enfermeira se interaje constantemente, a possibilidade de uma relação amorosa, ou melhor, tendo um "sintiendo compasión" capaz abarcar o sofrimento e revelando a Pessoa de Jesus.
    Jesus é assim o "modelo de humanidad plena" e dá sentido a toda a bondade que a existe dentro do humano e que favorece entre seus pares a fraternidade e a bondade tão querido em seu seio. Essa é com certeza a ferramenta que precisamos.
    É isso aí Nestor!

    Hugo Galvão

    ResponderExcluir